Sí chic@s, sí. Mañana... MAÑANA. Parece mentira que hace sólo un poco más de un año estuviese pisando estos pasillos por primera vez, como algo totalmente nuevo. Y ahora soy uno de esos veteranos que en su día veíamos vistiendo de traje para sus presentaciones finales pomposas y demás... Un año de veteranía por estos pasillos.
Bueno, como podréis deducir de las primeras líneas, ya aconteció el examen final. Y pasó sin problemas. Fueron unos pocos días de trabajo intenso, que no duro (al menos a estas alturas ya no se le considera tal a doce horas diarias...bah). El caso es que el lunes presentamos nuestra propuesta al caso final que se nos dio. Hubimos de hacerlo ante un tribunal de tres profesores de la casa. Quince escasos minutos para presentar toooodo nuestro trabajo sobre el tema y luego algunas preguntas para defender nuestras soluciones. Nada relevante. Todo fue tranquilo.
El caso es que se acabó. Ya han colgado las notas del campus. Así que fiel a mi costumbre y mi transparencia, aquí os las muestro.
Tras el examen, han venido varios días de cañas, cenas, copas y celebraciones. Queda una última mañana en la noche y luego, muchos de mis compañeros retornarán a sus respectivos países... Espero poder volver a verlos si no a todos, si a los más especiales. Con toda la caña que nos han dado... al final voy a terminar añorando esto... :(
Bueno, pues ahí os queda. Voy a ver si me dedico un rato a seguir enviando curricula que aún tengo que encontrar trabajo. En cuanto tenga un hueco os escribo para contaros qué tal fue la graduación, aunque dos horas de speech no pinta muy bien, la verdad.
Un abrazo para ellos y besitos para ellas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario